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Tras la intensa reestructuración, saneamiento y reforzamiento de la solvencia llevados a cabo para corregir los desequilibrios del pasado, el beneficio ha regresado a la cuenta de resultados del sector bancario español si bien los niveles actuales de rentabilidad son reducidos e inferiores al coste de captar capital. En este escenario, el gran reto es incrementar la rentabilidad, siendo este objetivo el que marca las estrategias futuras del sector.

Varios son los motivos que explican la reducida rentabilidad de la banca española: el contexto de reducidos e incluso negativos tipos de interés que lastran el margen financiero; el elevado volumen de activos improductivos, tanto en forma de préstamos morosos como de activos adjudicados; la desaceleración de las economías emergentes, donde algunos bancos tiene una eleva exposición; el desapalancamiento pendiente de la economía, que condiciona la recuperación del volumen de negocio; la presión regulatoria que plantea un calendario de creciente necesidad de capital y de activos con capacidad de absorber pérdidas; los riesgos geopolíticos, algunos en la eurozona, que podrían tensionar de nuevo la prima de riesgo y por tanto generar caídas en el valor de los activos bancarios; la creciente competencia tanto bancaria como no bancaria; el aumento del coste de la financiación por las nuevas reglas del juego en el rescate de entidades (bail-in); etc.

En este contexto, la reacción de las entidades financieras se está dirigiendo hacia nuevos ajustes en la capacidad instalada (lo que plantea la oportunidad de nuevas fusiones), hacia la digitalización de la actividad bancaria (como estrategia para reducir costes y hacer frente a una demanda por canales distintos al tradicional), hacia un nuevo modelo de negocio con una estructura de ingresos donde pesan más los ingresos distintos al cobro de intereses (como las comisiones), etc.

Este complicado escenario para la recuperación de la rentabilidad bancaria es el marco de referencia en el que se inscribe la VII Jornada sobre el sector bancario español. Para ello, una vez más, se combina la presencia de expertos del mundo académico y de profesionales del sector, pertenecientes a diversas universidades e instituciones financieras.

La Jornada se estructura en torno a dos mesas de debate. Una primera de corte más académico donde se reflexiona sobre los retos a los que debe enfrentarse la banca española para recuperar la rentabilidad, y una segunda donde los Consejeros Delegados de dos de las principales instituciones de crédito del país expondrán sus puntos de vista y sus estrategias de negocio para afrontar el difícil escenario.

La Jornada está dirigida al público en general, académicos y profesionales del sector bancario interesados en el análisis del sector.