Áreas de investigación

El proyecto pretende identificar los factores que contribuyen a mejorar la igualdad de oportunidades en el ámbito educativo a nivel de CC.AA. y a las políticas que deberían implementarse para conseguirla. Para ello se utiliza el concepto de “resiliencia”, un término relativamente novedoso en este ámbito que ha ido cobrando protagonismo durante los últimos años. En base a este enfoque, un estudiante es considerado como resiliente si, dado su relativamente negativo entorno socioeconómico de origen, ha conseguido superar las adversidades y obtenido un rendimiento educativo por encima del esperado. El entorno socioeconómico de origen está formado por el contexto tanto social, como económico y cultural en el que se ha desarrollado cada estudiante. Por tanto, a mayor proporción de este tipo de estudiantes, mayor será la igualdad de oportunidades del sistema educativo y se tratará de sistema más inclusivo, pues el entorno socioeconómico de origen es menos determinante en el desempeño educativo.

El uso del concepto de resiliencia para medir la igualdad de oportunidades tiene la ventaja de poner en el foco a aquellas personas que más lo necesitan y, con ello, otorgar mayor protagonismo a la igualdad de oportunidades educativa. Se utilizarán todas las oleadas disponibles de la encuesta PISA, con las que se podrían explotar las diferencias en términos de igualdad de oportunidades por comunidades autónomas e incluso realizar comparativas a nivel internacional.