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Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas

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Los jóvenes piensan que la integración en la UE es positiva pero que la influencia de España en su funcionamiento es limitada

La jornada Hablamos de Europa ¿Qué Europa queremos? reúne al mundo de la empresa, la administración y la universidad para mostrar a los estudiantes las ventajas de la UE, especialmente, para su futuro laboral

La jornada de debate Hablamos de Europa ¿Qué Europa queremos?, organizada por la Fundación Ivie, reunió ayer a más de un centenar de estudiantes universitarios que querían saber qué puede aportarles Europa. Todos los ponentes coincidieron en destacar la oportunidad que representa la libertad de movimiento que otorga la UE a sus ciudadanos y que facilita la formación fuera de las fronteras, tanto como estudiante Erasmus como después a través de prácticas profesionales en el extranjero.
La sesión, integrada entre las actividades apoyadas por la iniciativa Hablamos de Europa, que impulsa el Ministerio de Asuntos Exteriores para fomentar la consulta ciudadana en relación al futuro de Europa, reunió a representantes de la empresa, de la universidad y de la Administración para mostrar a los estudiantes los diferentes puntos de vista sobre las aportaciones de la integración europea.

El acto fue inaugurado por José Manuel Pastor, decano de la Facultat d’Economia de la Universitat de València, quien destacó los efectos positivos que tiene en el expediente académico del alumnado la experiencia de realizar algún curso en una universidad extranjera. Por su parte, Matilde Mas, directora de Proyectos Internacionales del Ivie y organizadora de la jornada, mostró su preocupación por la falta de conexión de la ciudadanía con respecto a Europa y, especialmente, entre los más jóvenes.

Para ofrecer la visión sobre Europa de los asistentes al acto, se realizó una encuesta interactiva en la que más del 90% de los participantes opinó que la pertenencia de España a la Unión Europea le resulta positiva y que los ciudadanos de la Unión Europea aportan más juntos que separados. Sin embargo, solo el 49% de los encuestados cree que su opinión cuenta en Europa y únicamente el 28% piensa que la influencia de España en la UE se verá reforzada durante el próximo año. Es decir, los jóvenes creen que la UE es positiva, pero dudan de la influencia que España pueda tener en el funcionamiento de la misma.

En la mesa redonda que se realizó a continuación, el vicerrector de la Universitat de València, Joaquín Aldás, citó la mejora de la empleabilidad como una de la mayores ventajas de realizar un curso Erasmus, sin embargo, en su opinión, lo más importante es “la amplitud de miras que aporta y que contribuye a no dejarse engañar por las mentiras populistas”. Por su parte, la consejera delegada del Grupo Dacsa, Araceli Císcar, destacó las ventajas que tiene para una empresa pertenecer a un gran bloque negociador como es la UE frente a terceros, especialmente en el sector de la agricultura. Pero, además, recordó que la legislación europea obliga a mantener unos estándares de calidad muy altos que benefician a todos los consumidores. En cuanto al papel de la UE en la formación de las personas, Císcar remarcó que lo que buscan ahora las empresas son empleados sin problemas de movilidad entre países, con capacidad para trabajar en equipo y de liderazgo, además de otros conocimientos transversales que es más fácil adquirir tras una experiencia en el exterior.

También participó en la jornada Vicente Francés, subdirector de la Fundación Universitat-Empresa Adeit, quién confirmó el mensaje de Araceli Ciscar con una cifra “el 64% de las empresas afirma que la experiencia internacional y las capacidades transversales que se adquieren en una estancia en el exterior cuentan en la contratación”.
Por último, Andreu Iranzo, director general de Fondos Europeos de la Generalitat Valenciana, incidió en la importancia de las ayudas europeas para desarrollar programas destinados a mejoras en el empleo, formación y lucha contra la exclusión social. En su opinión, una parte de la desafección de la ciudadanía ante la UE puede explicarse por la lentitud en el proceso de integración, que está impidiendo ver las ventajas del mismo.

25 septiembre 2019

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